Mi casa huele hoy a flores y hierbas salvajes.
Huele a arte y en femenino.
Cambió de color y corre un brisa teñida de rojo, rosa, lila y amarillo.
Desde esta mañana siempre hay un vecino mirando hacia mi balcón...
Esperando ver de nuevo arder otro baile ritual.
Porque ayer había seis brujas cantando sus alegrías... y sus tristezas.
Que lloraron unidas en un abrazo,
y se hicieron fuertes y libres.
Se enamoraron abrazando la magia,
y llenaron de amor su alma.
Seis mujeres salvajes dando y recibiendo luz.
Buscando la esencia de la vida y la muerte a través del canto.
Ayer estábamos donde teníamos que... Ser.
El Mediterráneo en Palavas (1854)
